La era de Rob Ford terminó. El polémico alcalde cedió el paso para que una nueva cara dirija a Toronto y la población puso la responsabilidad sobre John Tory.
El antiguo diputado provincial conservador ganó los comicios de este lunes con el 40% de los votos, recibiendo el apoyo en base a sus propuestas de responsabilidad fiscal y de control de gastos.
Tory obtuvo 394.775 votos, por delante de los 330.610 (33,7%) que consiguió Doug Ford, hermano del antiguo alcalde y quien se unió a la campaña en el último mes.
La gran sorpresa fue el bajo rendimiento de Olivia Chow. La antigua diputada federal del NPD obtuvo sólo 23% de los votos a pesar de que hace unos meses tenía el mayor apoyo en las encuestas.
Las elecciones de Toronto de este lunes representaron también un récord de participación. En total 980.177 personas ejercieron su voto en la ciudad más importante de Canadá, lo que representa el 60% de los electores registrados.
Esto representa un gran avance en relación al 50% que votó en 2010 y el 38% que lo hizo en las elecciones municipales de 2003.
Para dar una perspectiva, el promedio de participación en las elecciones federales es de 60%.
Merci beaucoup
Una de las grandes sorpresas se dio en el discurso de victoria de Tory, quien arrancó con unas palabras en francés: “Mesdames et messieurs, les gens ont fait leur choix ce soir. Nous allons commencer à construire notre ville: un Toronto prospère, juste et respecté“.
Sus palabras en la lengua de Molière robaron aplausos de muchos, especialmente de la comunidad francófona de todo el país, que lo vieron como un buen gesto de quien dirigirá la ciudad canadiense más grande e importante, y que también cuenta con una considerable comunidad francocanadiense.
Sin embargo, muchos no apreciaron que Tory hiciera referencia a uno de los dos idiomas oficiales de Canadá. Por ejemplo, el periodista Cathal Kelly envió un comentario irónico en Twitter sobre la relevancia del francés en Toronto: